El movimiento de carga en el principal puerto del país se estancó en la primera gestión de Bukele, según las propias estadísticas de CEPA. En 2023, el flujo de mercancías fue de 5.5 millones de toneladas, un 1% más con respecto a 2019. De los cuatro años analizados, 2020 y 2022 registraron valores negativos. Los datos oficiales están muy lejos de los mencionados por el presidente Federico Anliker.
En el programa “Punto de Vista» de Radio YSKL, el presidente de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), Federico Anliker, se refirió a la actividad del principal puerto mercante del país en su administración. “(…) sobre todo el puerto de Acajutla, que año con año está creciendo entre un 15% y 20% de movilidad de carga”, afirmó el funcionario.
Voz Pública contrastó esos datos con la información disponible en los informes de la autónoma, en concreto con los anuarios estadísticos del Departamento de Operaciones. La movilidad de carga incluye la mercadería que entra y sale del país, y se mide en toneladas métricas.
Tomando como referencia los datos de CEPA, se concluye que lo expresado por Anliker es falso. Ningún año creció en la proporción que él mencionó. Lejos de eso, el movimiento de carga en el puerto de Acajutla registró un crecimiento del 1% al comparar 2019 y 2023. En uno y otro año, la cantidad de carga que se movilizó en el puerto fue similar, en torno a los 5.5 millones de toneladas. Incluso si se tomara como referencia 2018, el año previo a la llegada de Bukele al poder, cuando se movilizaron 5.05 millones de toneladas, el aumento sería del 8.8%, muy lejos del rango de crecimiento del 15 al 20% mencionado por el presidente.
Del tiempo analizado, dos años tuvieron un comportamiento negativo, es decir, la carga se redujo con respecto al año anterior. Uno fue 2020 cuando el comercio mundial se desplomó por la propagación de la COVID-19 y las medidas adoptadas por los gobiernos. En general, las economías registraron su mayor contracción desde la Segunda Guerra Mundial.
En 2021, el movimiento de carga registró un aumento de 11.7% como efecto rebote del desplome del año previo cuando cayó el 9.3%, hasta los 4.93 millones de toneladas.
En 2022, volvió a decrecer en poco más de 250,000 toneladas, un 4.4%, caída de la que se recuperó al año siguiente. En 2023, el puerto sonsonateco registró un movimiento de 5.50 millones de toneladas métricas, un aumento del 4.5% con respecto al año anterior.
El puerto de Acajutla maneja carga general, carga a granel sólida y líquida, y en contenedores. La mayor parte de las mercancías se importan de la región centroamericana, Estados Unidos y China.
Medida en teus
Otra manera de medir el movimiento de la carga es en teus, una unidad de medida que equivale a un contenedor de 20 pies y utilizada para comparar la actividad entre los puertos.
De acuerdo con la información disponible en la web de CEPA, la carga movilizada medida en teus tampoco coincide con lo expresado por el presidente de la institución. De hecho, en 2019, la cantidad de teus movilizado alcanzó los 257,300, un 0.5% más que en 2023 (256,000). En general, el periodo analizado muestra un comportamiento irregular, con un año que aumenta la carga y al siguiente disminuye.
En 2021, la carga que se movilizó en el puerto alcanzó los 272,000 teus, un techo que ya no se volvió a alcanzar en los dos años siguientes.
Inversión
En varias entrevistas, el presidente de la autónoma también destacó la inversión realizada en el puerto en Acajutla en su gestión y minimizó la de los gobiernos pasados. En los últimos cinco años, de acuerdo con el Ministerio de Hacienda, su administración invirtió $21 millones, casi el doble que en la gestión anterior, cuando fueron $11.9 millones. No obstante, hay que aclarar que buena parte del gasto se gestó en 2019, año en que adquirió una serie de grúas móviles portuarias, valoradas en casi $8 millones. Esa adquisición venía programada desde la gestión anterior.
Recientemente, el gobierno informó de un acuerdo con el conglomerado turco Yilport Holding Inc., que promete inversiones millonarias para modernizar ese puerto y el de La Unión a cambio de operar ambas infraestructuras.
Se llamó dos veces a CEPA para consultar sobre lo expresado por Federico Anliker, pero no devolvieron la llamada. También se le envió un correo, pero al momento de la publicación no había contestado.